Al analizar un avalúo es importante revisar la fecha en que se realizó. Por lo general, la vigencia de un avalúo es de 6 meses, pero es importante señalar que en dicho periodo no debe de haberse realizado ninguna modificación a la propiedad.
Las modificaciones al entorno urbano también pueden afectar la deseabilidad y por consiguiente el valor de una propiedad, por lo que es importante asegurarse que en esos 6 meses tampoco hayan cambiado las características de la zona donde se encuentra la propiedad.
Por otro lado, aunque no se haya hecho ningún tipo de modificación a la propiedad y su entorno, es necesario considerar que las condiciones de mercado siempre están cambiando y esto afecta en todo momento el valor de los bienes inmuebles.
Ya sea por inflación, por cambios en la oferta inmobiliaria o cualquier otro ajuste económico, lo más prudente es asegurarse que el avalúo con el que se justifica y respalda el precio de un bien inmueble sea de una fecha reciente.